RONDA DE PAN Y HUEVO, HOSPITAL, IGLESIA, HERMANDAD DEL REFUGIO Y SU COLEGIO

Un gran farol alumbraba a un pequeño grupo de hombres que intentaba localizar a menesterosos y enfermos, en las noches del año 1615, por las calles de Madrid. En sus zurrones llevaban huevos duros y libretas de pan que repartían entre los necesitados. Se hacían acompañar de sirvientes que portaban sillas de mano, con el fin de trasladar a los moribundos a hospitales donde quizá, en alguna medida, pudieran mitigar sus dolencias o fallecer en paz. Así nació la conocida como Ronda de Pan y Huevo por iniciativa de Pedro de Cuenca, vecino de Madrid y propietario de casas y solares donde fundaría el Albergue de San Lorenzo.

Fotografía: M.R.Giménez (2019). La Ronda pintada sobre una silla de mano de la Hermandad del Refugio, sita en el Museo de Historia de Madrid.

Dicha Ronda, a la que los madrileños dieron nombre, era minuciosa con el tamaño de las viandas que distribuía: todas tenían que ser iguales y encontrarse en perfecto estado. Fue así como los huevos a repartir eran medidos con un escantillón antes de ser ofrecidos y Si pasa no pasa. Si no pasa, pasa (haciendo alusión a que su volumen no debía ser más pequeño que el agujero del patrón fijado).

Fuente: prensahistorica.mcu.es 
Escantillón usado como medida para los huevos.

Aquellos eran los tiempos de Felipe III, que en el año 1606 había fundado el Hospital de San Antonio de los Portugueses situado entre las calles de la Puebla, corredera Baja de San Pablo y de la Ballesta, junto a una pequeña iglesia. Avatares históricos harían cambiar su nombre por el de Hospital de San Antonio de los Alemanes, algunas décadas después.

Fotografía: M.R.Giménez (2019)
Maqueta de León Gil de Palacio y en el centro el Hospital de San Antonio de los Alemanes.

Este Hospital fue ganando importancia con el tiempo, decidiéndose la construcción de una nueva iglesia más acorde con la relevancia de la institución. De esta suerte se encargaría al arquitecto Pedro Sánchez el proyecto, que llevaría a cabo Francisco Seseña, y en el que también intervendría Juan Gómez de Mora para edificar la, por entonces, Iglesia de San Antonio de los Portugueses (Alemanes).

El magnífico edificio quedó rematado en el año 1633, siendo una de las más importantes obras barrocas que se pueden admirar en Madrid. En su maravillosa ornamentación intervinieron: Francisco Ricci, Juan Carreño Miranda, Lucas Jordán, Vicente Carducho, Eugenio Cajés o Manuel Pereira, entre otros artífices.

Fotografía: M.R.Giménez (2015)
Iglesia de San Antonio de los Alemanes.

El origen de la Santa Pontificia y Real Hermandad del Refugio y Piedad, institución a la que se incorporaría la Ronda del Pan y Huevo, se remonta al año 1618 (fecha de su acta de constitución). Bernardino de Antequera, Pedro Lasso de la Vega y Juan Jerónimo Serra fueron sus fundadores, albergando en casas adquiridas para tal fin a los menesterosos recogidos por la Ronda en la vía pública.

La Hermandad iría ampliando sus servicios creando una hospedería, haciéndose cargo de los deficientes mentales, recogiendo criaturas abandonadas y fundando un colegio para niñas huérfanas. Felipe V concedió a la Hermandad del Refugio la administración y el patronato de todos los establecimientos antes citados en el año 1702.

Fotografía: Manuel Chamorro (2023)
Puerta de la Hermandad del Refugio, sita en la Corredera Baja de San Pablo.

Con el título de Colegio Purísima Concepción vino a fundarse por la Hermandad el establecimiento que acogería y daría enseñanza a niñas desamparadas y sin recursos. Su constitución tuvo lugar el día 30 de noviembre de 1651.

Fotografía: Manuel Chamorro (2023)
Fachada del Colegio Purísima Concepción, sito en la calle de la Puebla.

Las niñas recogidas en este colegio no debían ser menores de siete años ni mayores de dieciséis, siendo imprescindible que no estuvieran baldadas, deformes o enfermas, pero sí bautizadas, no de forma reciente. Vestían con hábitos de lana, camisas blancas, cabeza cubierta por una toca rizada y zapatos cerrados, teniendo prohibidas sus salidas del recinto. En él, junto a una profusa enseñanza espiritual, aprenderían a leer y escribir, llevar las cuentas y todo lo relativo a las tareas del hogar. Al llegar a la edad límite de permanencia en el centro profesarían en una orden religiosa o contraerían matrimonio, haciéndose cargo el colegio de la dote correspondiente. Las alumnas más consideradas podían optar a ser enfermeras, sacristanas o roperas de la institución, pero nunca rectoras, maestras o porteras.

Fuente: prensahistorica.mcu.es (1935)
Niñas con el antiguo uniforme del colegio.

Con el fin de centralizar todos sus servicios la Hermandad del Refugio decidió levantar un nuevo edificio, anexo a la iglesia. Para ello sería derruido el antiguo hospital de la Corredera Baja de San Pablo, encargando al arquitecto Antonio Ruiz de Salces los planos para su construcción. En él se unificarían las oficinas, la hospedería y, en su segundo piso, el colegio de niñas. Las obras comenzaron en el año 1885 y concluyeron en 1888, quedando inaugurado el lunes 6 de febrero el edificio que hoy podemos contemplar.

Fotografía: Manuel Chamorro (2023).
Edificio del Refugio entre las calles de la Puebla y de la Ballesta.

Un nuevo sistema se impuso en la Hermandad del Refugio, tras levantar su moderna construcción. Los necesitados de Madrid ya no estaban en las mismas condiciones penosas de los siglos anteriores y no se hacía necesario recoger de las calles a las niñas huérfanas para darles cobijo. El Colegio Purísima Concepción sería destinado, a partir de entonces, a alumnas procedentes de familias venidas a menos que habían sido seleccionadas mediante sorteo para obtener una plaza de internado, mediopensionista o de régimen externo. Las monjas Teresianas dirigirían la educación de las dieciocho educandas a su cargo para enseñarlas a fregar, a barrer, a guisar, a lavar, a coser, a zurcir, a bordar, a tejer, lo mismo que después cultivarían las diversas disciplinas intelectuales, según la vocación de cada una. Del colegio saldrían las niñas con una carrera para que pudieran ganarse la vida, y con una educación perfecta, sabiendo todo cuanto debe saber una mujer.

Fotografía: M.R.Giménez (2023)
Puerta del Colegio Purísima Concepción.

Por fortuna, mucho ha cambiado la forma de enseñar en este Colegio, uno de los más antiguos de Madrid, que no ha cejado en sus funciones desde que fue creado en el año 1651. En la actualidad, doscientas cincuenta niñas y niños reciben allí su educación concertada, en las etapas de Infantil y hasta Secundaria, acorde con los planes pedagógicos establecidos.

La prensa actual comunica que la Hermandad del Refugio, bajo la presidencia de Fernando Ramírez de Haro, conde de Bornos, ha ordenado el cierre del colegio Purísima Concepción alegando que la estructura no ofrece las condiciones de seguridad oportunas, pero con la intención de ceder la propiedad a otra institución religiosa, universitaria y privada.

Toda ciudad que olvida su historia se convierte en vulgar.

Fuentes:

eldiario.es

hemerotecadigital.bne.es

memoriademadrid.es

prensahistorica.mcu.es

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La Hermandad del Refugio y su famosa Ronda de Pan y Huevo